Las impresoras 3D se hallan (y seguirán) al alza

De las 244.533 unidades de impresoras 3D que Gartner espera que la industria distribuya a lo largo de todo 2015, se pasará a casi medio millón de dispositivos el año que viene.

Las impresoras en tres dimensiones están llamadas a conformar en el futuro uno de los segmentos tecnológicos más pujantes de la industria. Por ejemplo, se espera que de aquí a 2019 sus distribuciones se vayan duplicando año tras año o que incluso aumenten un poco más.

¿Qué quiere decir esto en números? Para empezar, que de las 244.533 unidades que se espera acabar colocando a lo largo de todo 2015, se pasará a casi medio millón de impresoras 3D en 2016. En concreto, serán 496.475 unidades.

Así lo predice Gartner, que también se atreve a fijar en 5,6 millones la cifra final de envíos de impresoras 3D alrededor del mundo para dentro de cuatro años.

No en vano, “las rápidas innovaciones de calidad y rendimiento” que se estarían viviendo ya “por todas las tecnologías de impresión 3D están impulsando tanto la demanda empresarial como de consumo”, tal y como advierte Pete Basiliere, vicepresidente de investigación de esta consultora.

Y lo hacen “con tasas de crecimiento de la distribución de unidades que aumentan significativamente”, alentando la “transformación desde un nicho a un mercado global de base amplia”.

Antes del cambio de década, hay otro dato que deberemos contrastar. Gartner cree que para entonces más de 4 de cada 10 máquinas que hayan sido enmarcadas dentro de los dos rangos de precios más bajos, con un tope de 2.500 dólares como máximo, no subirán de los 1.000 dólares. Lo veremos.