Éste será el aspecto del “supermartphone” HTC M8, según las filtraciones

Aunque parece que la composición externa será similar a la del HTC One, una imagen que circula por la Red apunta a un sistema de doble cámara trasera.

HTC ya ha explicado que uno de los planes maestros para enderezar su rumbo de ahora en adelante será apostar por smartphones de entre 150 y 300 dólares que le permitan ser más competitiva.

Imagen: NextPowerUp
Imagen: NextPowerUp

Pero eso no quiere decir que se vaya a olvidar de la liga de los “supersmartphones“. De hecho, el HTC One debería ser sustituido este mismo año por el HTC M8.

De él se sabe, o más bien se rumorea, que lucirá una pantalla de alrededor de 5,2 pulgadas de tamaño con resolución 2K. Estará gobernado por Android, abandonaría el anterior procesador Snapdragon 600 por un Snapdragon 800 más potente y reforzaría la memoria RAM con 3 GB en vez de 2 GB.

Además, no se descarta de la inclusión de un sensor de huellas digitales para identificar a su dueño, al más puro estilo iPhone 5s. Esta característica también sería compartida por el próximo Samsung Galaxy S5.

Aspecto del actual HTC One
Aspecto del actual HTC One

Esa es la teoría, ¿pero cómo se materializará? ¿Qué aspecto tendrá el próximo buque insignia de HTC?

Por lo que se desprende de un par de imágenes filtradas por NextPowerUp, una de las cuales reproducimos al lado de estas líneas, mantendrá la misma estructura de formas redondas y ausencia de botones físicos que su predecesor.

Eso sí, en la parte posterior se observa la inclusión de un sistema de doble cámara y doble sensor, que se convertiría en su principal gancho. Y, en cuanto a la propia interfaz de usuario, existe cierta variación en la posición elegida para los botones de navegación.

Dado que por el momento no hay confirmaciones ni imágenes oficiales, tendremos que seguir esperando para conocer el resultado final.

Otro terminal del que se han ido desvelando detalles durante las últimas horas es el HTC Desire 8, como bien os cuentan nuestros compañeros de The Inquirer en este artículo.