Es 1 de marzo: Entra en vigor la Ley Sinde

El Real Decreto aprobado en diciembre por el Gobierno permite que los propietarios de derechos de autor denuncien ante una Comisión administrativa a aquellas páginas sospechosas de perjudicar su patrimonio.

La Asociación de Internautas y las empresas de Internet han intentado poner freno a la aplicación de la conocida como Ley Sinde-Wert, en referencia a los dos políticos que la han promovido, pero sus recursos ante el Tribunal Supremo han fallado en uno de sus principales objetivos. Y es que hoy mismo entra en vigor el Real Decreto que desarrolla una nueva legislación para evitar la piratería de contenidos protegidos por copyright.

internet¿Cómo funcionará? En primer lugar se establecerá una Comisión de Propiedad Intelectual capaz de obligar a la retirada de contenidos considerados ilegales o de cerrar aquellas páginas web que alojen o enlacen determinados archivos sin autorización de sus propietarios. Para ello este conjunto de funcionarios de los Ministerios de Presidencia, Cultura, Industria, Economía y Competitividad, no necesitarán esgrimir una orden judicial en primer término.

La Comisión sólo actuará tras una denuncia que deberá efectuar aquella persona que considere que sus derechos de autor han sido violados. En ese momento, se abrirá un plazo de 20 días para investigar si el portal señalado ha dañado el patrimonio del demandante y si tiene ánimo de lucro. De demostrarse la infracción, los responsables de la web serán identificados por los prestadores de servicios de Internet a instancias de un juez y tendrán 48 horas para borrar el contenido o recurrir la demanda.

Finalmente, existe un plazo de deliberación que puede desembocar en la eliminación definitiva del material o incluso en la interrupción de la actividad de la página web.

Desde la operación que condujo a la clausura del servicio de alojamiento de archivos Megaupload, han sido muchas las páginas que han decidido borrar contenido de forma voluntaria para capear la aplicación de leyes antidescarga, tal y como recuerda EuropaPress. Aunque otras han optado por la posición contraria y se han unido a una “iniciativa de desobediencia civil electrónica” en la página wertdeenlaces.net, autoinculpándose de usar una obra de un socio de la SGAE sin su permiso y accediendo a ser denunciados por su creador, con el objetivo de saturar el sistema.